lunes, 3 de noviembre de 2008

Definitivamente en las tardes con sol,

dulcemente en las tardes con viento,

con la primera luz del día amaneciendo en mi cuerpo,

en las noches y con las estrellas alumbrando el firmamento,

en las personas que pasean perros,

en los árboles que dan frutos,

en la veredas donde me pierdo,

en los mensajes por teléfono,

en las esquinas de diarieros,

en las miradas de los niños ajenos,

en las siestas de lluvia,

en mi escritorio,

en mis amigos,

en el papel donde te escribo,

en estas manos viejas de lamentos,

en el amor que me imagino,

en mis ojos que salpican melancolía,

en los abrazos de mi madre,

en la nostalgia de los años que no se fueron,

en el silencio comprensivo de mi padre,

en mi corazón desarmado,

en mi desastre diario,

en mí armándome cuando bailo,

en mis estados cambiantes de ánimo,

en los libros que compro y nunca leo,

en las páginas que ha roto mi alma,

en las canciones que te canto bajo el agua,

en las canciones que no te canto para no ahogarme,

definitivamente…dulcemente, te extraño.

6 comentarios:

Unknown dijo...

En algún lugar de todos esos que describes, probablemente extrañes menos; será cuestión de empezar por allí.

María Gabriela Costigliolo dijo...

Edipo amigo mio, como le va tantisiimo timepo.
Yo creoq ue ud tiee razon y los amigos que tengo son una salvacion misericordiosa... Un beso

Walterio dijo...

El ser amado impregna nuestro entorno con su presencia, cuando no está, todo queda incompleto.

María Gabriela Costigliolo dijo...

Walterio: eso es, el tema es que pareciera que esta en todo vioi, es como el aire.. Un beso

rama dijo...

El no estar puede ser desesperante y aún más si lo buscas en todas las cosas que si estan, pero bu!.
Saludos y besos.

María Gabriela Costigliolo dijo...

Rama:jajajajajaja lo mejor de todo esto fue el BU!!! si es agobiente buscar o peor encontarse con los recuerdos en cada cosa no???
Un beso