martes, 27 de octubre de 2009

Me preocupa tanto mi cuerpo y un día tendré que dejarlo, ser polvo, partícula de viento, ser calor, risa, arena, mar adentro, llanto finito de algún descontento, energía.
Me preocupa no saber entenderme cuando sé que te quiero, que te quiere irremediablemente mi pensamiento; cuando toda yo te conoce entero.
Me preocupa cuando soy terrestre y soy parte del deseo.
Me preocupa tanto lo que veo, lo que toco, lo que escucho, lo que hablo, lo que huelo, las cosas que se van de mi, las que poseo.
Me preocupa la muerte y lo desarmado que nos deja la ausencia de todo lo que pretendemos, me preocupa el mundo y su caos cotidiano y venidero.
Me preocupa irme sin dejarles mis señales, mis notas, las letras que llevo dentro.
Me preocupa no saber de dónde venimos, a donde vamos y qué carajo seremos.
Me preocupa tanto la existencia efímera de las personas, que tu paso sea efímero por mi vida, que todo sea circunstancia pequeña en toda una gran partícula.
Me preocupa que un día se desarme todo, que no quede nada de lo que llamamos vida.
Me preocupan en este instante cosas menos profundas y más sentidas.
Me preocupa no saberte cerca para mis abrazos.
Me preocupa como todo me delimita. Mano, pie, ojo, cabello, páncreas, uñas, sangre, boca, barriga.
Me preocupa esta hora con su sueño que no llega y que ni tu beso me lave las heridas.
Me preocupa no darme por vencida.

4 comentarios:

María Eugenia dijo...

que buen final...

usted debería preocuparse un poco menos quizá y ocuparse más, no?

saludos!

Soophiee dijo...

Te sigo. porque me gusto mucho este escrito. No tuve más tiempo de leer los anteriores.
Pero ya voy a ir por más!

Adios
Sophie
benas vibras!

María Gabriela Costigliolo dijo...

Euge: tosas estas cosas me ocupan la mayoria de las veces.. y me preocupo por eso la verdad por que son inevitables.... besos

María Gabriela Costigliolo dijo...

Soophiee: bueno muchas gracias. Te espero nuevamente. Besos